viernes, 30 de agosto de 2013

Capítulo 9

Y ahí estoy yo, Finnick Odiar, delante de los Vigilantes del Capitolio; se hará lo que se pueda.
Saludo e inmediatamente mis instintos se activan, miro a ambos lados escudriñando todo; veo un tridente pero está muy lejos y en mi camino hay varias estanterías de cuchillos y lanzas, así que alcanzo una lanza y la uso a modo de pértiga para llegar a mi objetivo y sobrepasar las estanterías, una vez con el tridente en la mano y con la misma rapidez con la que alcancé y usé la lanza, me dirijo al campo de tiro. Impresionante. Inconscientemente empiezo a lanzar y acuchillar los objetivos con el tridente (estos momentos tienen un ligero sabor a mi distrito), se que me queda poco tiempo ya que cada vez me miran menos Vigilantes, lanzo el tridente, que impacta exactamente en el centro de una de las dianas que están situadas al otro lado de la habitación. Y cuando me dispongo a abandonar la habitación veo de reojo que sobre mi cae una inmensa red, parecida a las que usamos para pescar en el Distrito 4, y como si de un juego se tratase deshago algunos de los nudos de la red antes de que caiga, con lo que se abre un agujero y la red cae rodeándome pero sin tocarme en absoluto.

Poco a poco los latidos de mi corazón se ralentizan hasta llegar a su velocidad normal y tras una ducha relajante, la cual no me gustaría terminar nunca, me llaman para cenar y ver las puntuaciones, no estoy nervioso; me visto, unos pantalones cortos marrones que parecen rotos y la misma camisa azul de botones, junto a unos zapatos planos que creo se llaman mocasines. Me miro al espejo. Estoy diferente, no solo ha cambiado mi forma de vestir; me toco el pelo cobrizo y salgo del baño algo molesto.
Llego al comedor, donde ya está todo el mundo.
- Finnick, hola-dice Clare con una media sonrisa, yo se la devuelvo junto con un gesto de cabeza
- Chico, ¿qué tal te fue...
- Shhh !!! que empiezan - Tigris corta a Mags y sube el volumen de la pantalla. Todos nos apresuramos a sentarnos en el mullido sofá morado y a mirar atentamente la pantalla.
Poco a poco van pasando las puntuaciones, hasta que le toca el turno al Distrito 4


Espero que os haya gustado, y si es así que os suscribáis, comentéis y lo paséis. Muchos besos y que la suerte está siempre de vuestra parte, tributos :)

jueves, 29 de agosto de 2013

Capítulo 8

Después del entrenamiento colectivo bajamos a un gran comedor con mesas, más bien bancos, para comer y sentarse; me acerco al menú, muchísimos platos pero me decanto por una ensalada de algas y salmón, que me recuerda demasiado a mi distrito.
Miro a ambos lados, no se dónde sentarme; me dirijo a una mesa vacía y me siento a comer solo.
Los profesionales juntos, como de costumbre, y los demás o solos o con los de su distrito... no veo a Clare, dónde se habrá metido.
Una vez en mi planta, en mi habitación; me cambio y busco a Mags, ahora mismo tengo dudas sobre todo excepto de cómo me llamo; estoy algo perdido, ya que este sitio, aunque sea solo una planta, es enorme, así que vuelvo a mi habitación y sin quererlo me quedo dormido...

Me duele la cabeza y quien quiera que sea el que llama a la puerta acentúa mi dolor:
- Ya voy - abro la puerta y veo a Mags, Clare, Tigris y mi equipo de preparación. - ¿Qué pasa?
- Chico, vístete y baja al centro de entrenamiento; hoy los Vigilantes puntuaran tus habilidades. - me visto a la velocidad de la luz; con unos pantalones anchos beige y una camisa azul de botones, también ancha y unas botas estilo militar como las que llevan los Agentes de la paz. - ahora que estáis los dos querría deciros que  me gustaría que mostrarais todas vuestras habilidades a los Vigilantes, hacerlo lo más rápido posible o se aburrirán o emborracharán, como sois del Distrito 4, seréis los cuartos por lo que los Vigilantes os prestarán algo más atención que a los últimos Distritos, y... - se corta un momento, respira hondo, nos mira fijamente y finalmente suelta de golpe- suerte a los dos.

Estamos todos en una pequeña sala oscura
- Distrito 1, Owel Miller - dice una voz robótica.
Tras un rato vuelve a sonar- Distrto 1, Oak Janson - y así sucesivamente hasta que llega mi turno - Distrito 4, Finnick Odiar - me levanto e instintivamente miro a Clare, que sin apartar la mirada del suelo solo dice.
- Finnick Odiar el ganador de los Sexagésimos quintos Juegos del Hambre...

lunes, 26 de agosto de 2013

Capítulo 7

Mientras sus lágrimas caen por mi hombro la abrazo fuertemente para que se sienta segura.
Se seca las lágrimas y se dirige a la sala de entrenamiento, supongo que ya ha pasado su momento de debilidad, entonces... por qué me siento tan mal por dentro...
¿Será por Annie? Quizá, la hecho de menos... y darle el beso a Clare, aun que fuera en contra de mi voluntad, no mejora las cosas... Mi Annie que se distrae con cosas insignificantes, la que me saca una sonrisa cuando nadie más puede, la que hace que me divierta simplemente estando sentado en la playa con ella...

Llegamos al centro de entrenamiento, donde una chica joven llamada Atala nos da instrucciones claras y después nos deja, miro a mi alrededor y pienso en ir a identificar hierbas ya que no sé nada sobre eso, pero luego lo descarto por la presencia de un chico con pinta de bruto del Distrito 2; así que al final voy directo al puesto de supervivencia en lugares extremos y después iré a probar algún arma, pues no se mucho de ellas; aunque se me da bien lanzar mi tridente para pescar.
Mientras espero mi turno para una especie de gymkana miro a los demás tributos, excepto los del 9 (Will y Hanna), el chico del 2, la chica del 10 y los dos del 1; ninguno me llama demasiado la atención. El tributo masculino del 6 es gracioso y se le dan bien las cosas manuales, si viviera en el 4 seguramente seríamos amigos.
Le toca a Clare, es ágil y rápida pero le falta fuerza, al terminar la gymkana el bruto del 2 le hace la zancadilla y se va riendo con los demás profesionales; vuelvo a mirar a Clare, esta muy roja y con los puños cerrados fuertemente. En un abrir y cerrar de ojos Clare coge una lanza que está a sus pies y la lanza contra el chico del 2, se clava en la pared en la que él esta apoyado, rozándole la nariz; en cuanto Clare se da cuenta de lo que ha hecho el rojo de sus mejillas aumenta y corre hasta un puesto para aparentar no haber roto un plato en su vida; mientras todo esto ocurre el chico del 2, que ha caído al suelo del susto, se levanta y empieza a envestir contra todo el que se le acerca, cada vez más rojo de furia ataca hasta a los entrenadores y a los Agentes de la paz, lo que me produce una ligera sonrisa maliciosa.

domingo, 25 de agosto de 2013

Capítulo 6

Recuerdo los juegos de Annie, fueron horribles; lo único que quería era sentarme en la playa y ver pasar las olas, esperando que nadie viniera a decirme que ella ya había muerto...
Después de dos semanas de Juegos los Vigilantes decidieron que la presa se rompiera y todos murieran, todos menos Annie, ella era la que mejor nadaba asique así ganó los Juegos. Fue el momento más feliz de mi vida cuando volví a ver a Annie, pero algo había cambiado, se había encerrado en si misma, por culpa de esos malditos juegos.

-Igual que yo... -mi comentario parece irritarla, porque se levanta y comienza a gritar de forma nerviosa.
- No, Finnick; tu eres fuerte, atlético y guapo; yo soy una pobre delgaducha que lo único que sabe es nadar y que en la vida ha cogido un cuchillo y mucho menos ha matado a alguien con él... Nada Finick, no se hacer nada... -tras sus palabras tira, con gran puntería, el bollo y sale rápidamente del comedor. Me doy cuenta de que todos me miran
-No... no era mi intención -tartamudeo.

Media hora después estoy llamando a la habitación de Clare para que baje al entrenamiento
- Clare... - digo con el brazo apoyado en la puerta y la cabeza sobre él- nos están esperando.
- Vale - la chica abre la puerta de golpe lo que hace que casi me caiga, para mi sorpresa esta sonriendo; decido no comentar nada.
- ¿Qué tienes pensado entrenar hoy?
- No sé... quizá... -en ese momento se gira rápidamente y me besa, cuando me doy cuenta de lo que está pasando la aparto y desconcertado la miro fijamente.
- Clare... yo...
- No pasa nada Finnick, debía hacerlo, antes de morir.
- No entiendo nada.
- Finnick era algo que tenía que hacer... - dice mientras se aleja, adoptando su postura habitual (encogida en si misma y mirando al suelo)- no... no me gustas, solo era que... -sus ojos se llenan de lágrimas - es por Danne...
Me acuerdo de Danne se suicido cuando su hermana murió en los juegos de hace tres o cuatro años; era un chico alto, de ojos grises inexpresivos y tez clara.
- Danne - continua Clare secándose las lágrimas, que cada vez afloran con más fluidez- antes de que su hermana fuera elegida en la Cosecha, que juntos daríamos nuestro primer beso, él era mi mejor amigo, mi corazón se rompió en mil pedazos cuando supe que se había suicidado... -y con la voz quebrada dice- ya que él se ha ido, quería dártelo a ti antes de morir...
Instintivamente me inclino sobre ella.

viernes, 23 de agosto de 2013

Capitulo 5

Al despertar la mañana siguiente me encontré a Mags sentada en la silla de mi habitación , mirándome fijamente; tras soltar un suspiro dijo:
-¿ No tienes nada qué preguntar muchacho? - yo asentí - venga, no te quedes pasmado.
Cogí aire y pregunté -¿ Qué fue aquel sonido de ayer, tras el desfile?
- Chico, ¿sabes por qué empezaron los Juegos del Hambre?
-Sí - respondo de un modo frío
- Sabes que todavía hay rebeldes, y aunque el Capitolio quiera ocultarlo hay descontento en los distritos, menos en el 1,2 y parte del 4... - levanta la cabeza y ve mi cara, por su expresión debo de estar entre llorando, sonrojado y apunto de gritar; la verdad es que tengo ganas de hacer ambas cosas pero respiro hondo e intento calmarme - Chico, tienes que relajarte y seguirles el juego solo así lo pasaras algo mejor; usa tus encantos: carisma, sonrisa, belleza y ese don de gentes- se levanta y camina hasta la puerta, la abre y antes de marcharse dice - no confíes en las cosas inofensivas...
Me quedo solo, desconcertado e intentando descifrar que significa su última frase...

Una hora más tarde llaman a la puerta y un avox de ojos muy abiertos me acompaña a desayunar veo a Tigris sentada a la mesa con mi equipo de preparación y en un sillón alejado a Clare mordisqueando una especie de bollo glaseado, algo en mi interior se revuelve; pero salgo del trance cuando el avox me da un toquecito en el brazo. Me siento a la mesa e intento parecer lo más amable posible.
- Hoy es día de entrenamiento, os aconsejo que aprendáis todo lo que no sepáis de supervivencia y lo más importante no hagáis caso a ningún otro tributo. - Tras un silencio por parte de Clare y mio Mags continua- ¿Qué se os da bien?
- Morir... -dice Clare con una tranquilidad asombrosa; nadie sabe que decir, hasta que me armo de valor y digo...